Los primeros equipos de la Costa jugaban un beisbol alegre, de alto voltaje, mucha agresividad al bate, pero erráticos defensiva y técnicamente.

Hablo de las tropas costeñas de inicios de los ochenta, en cuya estructura lo más llamativo era la presencia de los lanzadores Durley y Delring Downs, más prospectos que más adelante llegaron a ser algo real como Carel Lampson y Ray Carter, Gilbert Smith y Elry Britton.

Peleaban cada partido con unas ofensivas muy dinámicas y eventualmente de poder, pero terminaban perdiendo por un error o un mal corring en las almohadillas. Y el zurdo Rodolfo Taylor llegó a personificar al lanzador esforzado, pero a menudo afectado por fallas defensivas.

Ya en la recta final de los ochenta, vimos el progreso y la Costa llegó a ser una tropa de mucho balance. La ofensiva de Lampson, Carter, Britton, Smith y Oniel Humprey, se unió a la serpentina de John Allen, Carlos Hebert, Jess McCoy y Anhotny Rigby, y el título se fue para el Caribe.

El equipo que han confeccionado ahora no tardó en conseguir el equilibrio. Siempre con Davis Hodgson como mentor, la tropa costeña tiene buena ofensiva con Ronald Garth, Darrel Campbell, Roberto Martínez, Rommel Mendoza y Mark Joseph (enfermo en este momento).

En el staff de pitcheo no sen ven rectas como las de Durley o Rafel Lacayo, tampoco hay curvas como las de Delring o Taylor, pero entre Junior Téllez, Byron Guerrero, Eldo Thomas y John Moses, con el aporte del veterano Charles Wilson, han redondeado un staff competente.

La Costa juega siempre al beisbol alegre y con el voltaje alto, pero su técnica ha mejorado y la defensa va en progreso. Eso le ha llevado a ser, el equipo más eficiente del actual torneo, en el que muestra récord de 14-2, después de los primeros cinco fines de semana de liga.

Es probable que cuando se venga al Pacífico no se le vea ganando con tanta frecuencia, pero reducir el éxito de la Costa a que ganan en casa es no ser muy justo con un equipo que ha evolucionado y que viene de disputar el título contra el Bóer.

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